La seguridad de la nube pública es sin duda una de las consideraciones que realizan las empresas antes de realizar la migración de sus datos y servicios. Los riesgos asociados a la protección de datos, así como la preocupación por las amenazas de seguridad o el hecho de compartir servidores con otras empresas son algunas de las preocupaciones que más se repiten.
Sin embargo, la realidad es que a lo largo de los últimos años la nube pública ha demostrado ser más que segura, dando un servicio impecable a millones de empresas de todo el mundo sin ningún incidente de seguridad destacado. ¿Quieres saber por qué la nube pública es segura y por qué deberías confiar totalmente en ella? A continuación te daremos 5 motivos irrefutables que harán desaparecer todas tus dudas.
Seguridad de la nube pública: una preocupación habitual
De acuerdo con el noveno Barómetro de Riesgos de Allianz Global & Specialty 2020, los incidentes cibernéticos ocupan el primer lugar en relación con los riesgos más importantes para las empresas. Estas se sienten vulnerables ante las nuevas amenazas que aparecen en la red cada día: ataques DDoS, phishing, ransomware, filtraciones de datos y un largo etcétera.
Junto a la reducción de los costes operativos, la ciberseguridad es sin duda otro de los motivos por el que las empresas están migrando sus datos y procesos a la nube. La computación en la nube ofrece una capa de abstracción así como una mayor seguridad a sus usuarios. Sin embargo, muchas empresas aún siguen desconfiando de la seguridad de la nube pública.
De hecho, una investigación en la que participaron más de 200 gerentes de IT reveló que para el 51 % de los entrevistados la preocupación por la ciberseguridad les impedía realizar una adopción total de la nube pública, mientras que el 40 % estaba más preocupado por la inestabilidad del servicio y el 33 % debido a los costes asociados.
¿Por qué la nube pública es totalmente segura?
En la actualidad, las dudas acerca de la seguridad en la nube pública están injustificadas. Puede que al inicio los proveedores de la nube pública se vieran salpicados por algunos incidentes de seguridad, y que a causa de ello, algunas empresas sigan sin confiar en esta modalidad de Cloud Computing. Sin embargo, la realidad es que los principales proveedores como AWS o Azure se toman muy en serio la seguridad de sus usuarios.
Si comparamos los recursos que se deberían invertir para que un centro de datos local sea igual de seguro que un entorno de nube pública, enseguida nos daremos cuenta que la segunda opción es sin duda mucho mejor, y que los riesgos asociados habitualmente son tan solo temores infundados, tal y como sugieren los expertos.
Un estudio realizado por Oracle y KPMG asegura que el 40 % de los profesionales de TI y ciberseguridad cree que la nube pública es mucho más segura que los entornos locales, mientras que tan solo 2 % cree que esta es menos segura.
Si estos datos todavía no te convencen, a continuación encontrarás 5 motivos que te convencerán de que la nube pública puede ofrecer la ciberseguridad que cualquier proyecto necesita, sin importar el tamaño o la sensibilidad de los datos del mismo.
1. Protección contra todo tipo de ataques
La nube pública acumula ya cierta experiencia en lo que a los ataques cibernéticos se refiere. En los últimos años los proveedores de servicios han integrado recursos de todo tipo con el objetivo de evitar y combatir ataques cibernéticos. Herramientas robustas y recursos de seguridad automatizados, apoyados por la IA, que permiten que los entornos de nube pública sean seguros.
La seguridad de la red, permanentemente monitorizada, unido al cifrado y la protección de datos, las estrictas políticas de ciberseguridad o el control de accesos hacen de la nube pública un lugar seguro para sus usuarios. Esto, unido a las buenas prácticas de seguridad de los usuarios, tal y como harían entornos locales, hacen de la public cloud un lugar totalmente seguro.
2. Recursos compartidos pero no revueltos
Muchas empresas siguen desconfiando de la nube pública debido a que los recursos son compartidos entre los usuarios, lo que les hace creer que sus datos o aplicaciones pueden estar en peligro. Esto difiere totalmente de la realidad, pues cada usuario tiene su propio entorno virtualizado totalmente aislado de los demás, algo que garantiza la independencia total .
El acceso y la protección de los datos y aplicaciones en la nube pública evitan la exposición de los usuarios a posibles vulnerabilidades. El aislamiento y la contenerización de sistemas nos permiten incluso salvaguardar nuestras aplicaciones no solo de peligros exteriores, sino que también de posibles fallos que puedan surgir en nuestro ecosistema, algo que podría paralizar toda nuestra infraestructura en un entorno local.
3. Responsabilidad compartida
Mark Nunnikhoven, vicepresidente de Cloud Research en Trend Micro, suele decir que cuanto más cerca este el usuario del hardware, más responsabilidad tendrá. Si hay algo por lo que destaca la nube compartida es que el usuario tan solo tiene que preocuparse de sus datos, a diferencia de lo que sucede en infraestructuras locales.
El Cloud Service Provider (SCP) no solo se encargará de mantener las capas de software y hardware, sino que también invierte constantemente en nuevos recursos para que estos se mantengan actualizados y en óptimo funcionamiento, así como de su reparación o sustitución. El usuario puede despreocuparse de esta parte para centrarse en gestionar los riesgos asociados a sus acciones.
4. Recuperación
Según los últimos datos recogidos por el INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad), el 59,17 % de las empresas de menos de 10 empleados no realizan copias de seguridad externa de su información. Este dato mejora ligeramente (40,38 %) en las empresas de hasta 249 empleados y, y se reduce hasta el 30 % en las empresas de mayor tamaño. Estos datos son realmente preocupantes, ya que realizar backups de forma regular es indispensable.
Alojando nuestros datos en la nube pública no solo estaremos luchando activamente contra las amenazas, sino que también dispondremos de las herramientas necesarias para realizar copias de seguridad de una forma automatizada. En caso de desastre, podemos volver a la carga de una forma rápida, incluso levantando servicios “en caliente” sin que el usuario lo note.
5. Nivel de control alto
El nivel de control que tienes los usuarios de la nube pública o la privada apenas difieren en detalles. La nube pública permite que las empresas puedan controlar todos sus recursos de red, seguridad y hardware de una manera sencilla y flexible. Además, gracias a la creación de reglas de acceso y la monitorización 24/7 estas pueden tener un control total de sus aplicaciones.
Los proveedores de servicios actuales ofrecen recursos de protección avanzados con el objetivo de que sus clientes puedan tener un control total de sus sistemas, así como evitar que sus datos queden expuestos a las cada vez más numerosas amenazas de la red.
¿Ya estás listo para migrar tus datos y aplicaciones a la nube pública? Genial, te aseguramos que no te arrepentirás. En Ausum Cloud hemos ya acompañado a cientos de empresas durante su migración a la nube. ¿Necesitas ayuda en esta nueva etapa? Pues no lo dudes ni un momento y contacta con nosotros ¡Te estamos esperando!
