Las metodologías ágiles se han convertido en la piedra angular de la mayoría de empresas de desarrollo de software. De hecho, según el estudio que realiza anualmente el PMI (Project Managment Institute), el 71 % de las organizaciones a nivel mundial utiliza metodologías ágiles en sus proyectos.
En este escenario, el cloud computing y los proveedores de la nube pública han facilitado, en gran parte, la adopción de este tipo de metodologías. El trabajo en la nube ofrece a los desarrolladores las infraestructuras y herramientas necesarias para diseñar y entregar software de una manera ágil, flexible, rentable y productiva.
Tabla de contenidos
¿Qué son las metodologías ágiles de proyectos?
Las metodologías ágiles son un tipo de enfoque de desarrollo de software que ofrece un marco de trabajo iterativo que habilita la entrega continua. Su objetivo es afrontar los proyectos de tal forma que sea posible adaptarse a las condiciones cambiantes, aumentando así la flexibilidad y la capacidad de respuesta.
En cada ciclo de trabajo, el equipo recoge los requerimientos del cliente y las divide en pequeñas tareas que van afrontando paulatinamente. Estas se integran en un mismo software, se verifica que funcione correctamente y se entrega al cliente. Tras cada periodo de desarrollo, conocido como sprint, se evalúan los resultados y se vuelve a iniciar un nuevo ciclo.
Las metodologías ágiles se inventaron en 2001 con el objetivo de adaptarse a los cambios de la industria, ya que hasta el momento las entregas se prolongaban demasiado en el tiempo. El desarrollo era demasiado rígido, por lo que no se adaptaba a las necesidades de los clientes. Fue entonces cuando surgió el Manifiesto Agile, el documento que cambió la forma de afrontar los proyectos, diseñando un proceso que permitiera transitar hacia una gestión más flexible y fluida.
Manifiesto Agile: 4 valores y 12 principios
El Manifiesto Agile fue elaborado por 17 expertos en desarrollo de software durante un retiro en Utah organizado para abordar esta cuestión. Tras un intenso debate se dictaminaron los 4 valores y los 12 principios que debían respetar la gestión de un proyecto que se considerase ágil. Te mostramos todos ellos a continuación.
Los 4 valores del Manifiesto Agile
- Individuos e interacciones sobre procesos y herramientas
- Software funcionando sobre documentación extensiva
- Colaboración con el cliente sobre negociación contractual
- Respuesta ante el cambio sobre seguir un plan
12 principios del Manifiesto Agile
- La prioridad número 1 es satisfacer al cliente mediante la entrega temprana y continua de software con valor.
- Aceptar que los requisitos cambian, incluso en etapas tardías del desarrollo. Los procesos Ágiles aprovechan el cambio para proporcionar ventaja competitiva al cliente.
- Entregar software funcional frecuentemente, entre dos semanas y dos meses, con preferencia al periodo de tiempo más corto posible.
- Los responsables de negocio y los desarrolladores trabajan juntos de forma cotidiana durante todo el proyecto.
- Los proyectos se desarrollan en torno a individuos motivados. Hay que darles el entorno y el apoyo que necesitan, y confiarles la ejecución del trabajo.
- El método más eficiente y efectivo de comunicar información al equipo de desarrollo y entre sus miembros es la conversación cara a cara.
- El software que funciona es la medida principal de progreso.
- Los procesos ágiles promueven el desarrollo sostenible. Los promotores, desarrolladores y usuarios deben ser capaces de mantener un ritmo constante de forma indefinida.
- La atención continua a la excelencia técnica y al buen diseño mejora la agilidad.
- La simplicidad, o el arte de maximizar la cantidad de trabajo no realizado, es esencial.
- Las mejores arquitecturas, requisitos y diseños emergen de equipos autoorganizados.
- A intervalos regulares el equipo reflexiona sobre cómo ser más efectivo para a continuación, ajustar y perfeccionar su comportamiento en consecuencia.
Ventajas de las metodologías ágiles
Con el paso de los años, cada vez más empresas han ido adoptando metodologías ágiles por los buenos resultados que han demostrado conseguir en la gestión de todo tipo de proyectos de software. Algunas de las ventajas más destacadas son:
- Calidad del producto: los equipos de trabajo pueden desarrollar software eficiente que mejora continuamente. Asimismo, mediante la validación automatizada, es posible reducir y corregir el número de errores
- Satisfacción de cliente: el cliente no debe esperar grandes periodos de tiempo para recibir su software o incorporar novedades. El proceso de desarrollo incremental permite tener una base e ir aumentando sus funcionalidades poco a poco.
- Trabajo en equipo: la división del trabajo en equipo es mucho más flexible y organizada, cada programador se encarga de realizar su tarea, para más tarde, ponerlas en común con los otros miembros.
- Organización: los equipos pueden autogestionarse de forma sencilla y flexible. Un equipo bien organizado es sin duda también más efectivo.
- Flexibilidad: los requerimientos pueden cambiar y adaptarse con cierta facilidad, por lo que es mucho más sencillo hacer software útil reduciendo la complejidad de los cambios.
- Mejora continua: fomentan la reflexión y la mejora continua. Después de cada iteración, se lleva a cabo una retrospectiva para identificar áreas de mejora en el proceso.
- Reducción de costes: todas las ventajas anteriores acaban viéndose reflejadas en una reducción del coste del proyecto, así como un uso más efectivo de los recursos disponibles.
Metodologías ágiles más populares
A partir del manifiesto Agile han ido apareciendo diferentes metodologías muy similares con un mismo objetivo: aumentar la productividad y la eficacia en la gestión de proyectos de software. Algunas de las más populares en la actualidad son las siguientes.
Kanban
Una de las más utilizadas es probablemente Kanban, gracias en gran parte a un marco organizativo muy visual basado en tableros. Las tareas se dividen en tarjetas dentro del tablero, el cual ofrece columnas de estado de las mismas. En cada ciclo se seleccionan las tareas a desarrollar y se dividen entre los miembros del equipo. A medida que se van completando, las tareas pasan a la columna de finalizados y se pasa a seleccionar otra tarea.
Scrum
Scrum es una metodología ágil ideal para pequeños equipos. El equipo está liderado por un Scrum Master, el cual se encarga de la conversación con el cliente, gestión de tareas y en general, cualquier otra cosa que facilite el trabajo a los desarrolladores. El trabajo se divide en sprints, los cuales suele durar entre 1 y 4 semanas.
Los miembros del equipo se reúnen a diario en lo que se denomina a Scrum Daily Meeting, una reunión corta para comentar novedades y repartir tareas. Al final de cada sprint se realiza una “Sprint Review”, donde se evalúan los resultados conjuntamente en búsqueda de mejoras.
Design Sprint
Inventada por Google, Design Sprint es una metodología muy similar a la anterior, solo que sus sprints se dividen en 5 días muy bien definidos. El lunes se comprende el proyecto o tarea a realizar, el martes se realizan varios bocetos, el miércoles se decide cuál es el más adecuado, el jueves se diseña el prototipo y el viernes se prueba. Es ideal para validar nuevas ideas y resolver pequeños problemas.
Extreme Programming XP
El Extreme Programming es una variable Scrum que centra sus esfuerzos en la planificación continua, las pequeñas entregas frecuentes y el desarrollo basado en pruebas. Los programadores trabajan en parejas, aunque el código puede ser revisado y mejorado por cualquier miembro del equipo. Además, se apuesta por un diseño simple, la comunicación constante con el cliente y un ritmo de trabajo sostenible.
En este escenario donde clientes y desarrolladores necesitan infraestructuras capaces de adaptarse a los cambios constantes, el cloud computing se presenta como el mejor aliado para gestionar proyectos empleando metodologías ágiles. La flexibilidad, la escalabilidad y la capacidad de respuesta de la nube se alinean bien con los principios de las metodologías ágiles, permitiendo a los equipos entregar software de alta calidad de manera rápida y eficiente, incluso en entornos de desarrollo y operaciones distribuidos.
En Ausum Cloud trabajamos habitualmente con empresas de desarrollo de software que desean centrarse en el core de su negocio, dejando en nuestras manos la gestión de su infraestructura cloud. Si quieres dar un paso adelante, aumentando tu productividad de tu desarrollo y mejorando la eficiencia de tus aplicaciones, no dudes en contactar con nosotros.
