No cabe duda de que el cloud hosting está viviendo uno de sus mejores momentos en el sector empresarial, gracias en gran parte a las ventajas que ofrece frente al hosting web tradicional. Alojar aplicaciones, webs o e-ecommerce en la nube se ha convertido en una opción cada vez más atractiva para las empresas de todos los tamaños.
A pesar de que cada vez es más popular, no todos conocen las diferencias entre una opción u otra, así como las características, ventajas y desventajas de ambas opciones. ¿Cuándo elegir un hosting cloud es mejor que la opción tradicional? ¿Qué puntos hay que tener en cuenta? En este artículo respondemos a estas y otras preguntas interesantes alrededor del cloud hosting.
¿Qué es cloud hosting?
El cloud hosting o alojamiento en la nube es aquel que permite alojar todo tipo de aplicaciones y sitios web en un servidor virtual que utiliza recursos de múltiples servidores físicos. Empleando la virtualización, las aplicaciones o webs se guardan en un entorno de cloud computing donde los recursos se distribuyen de manera flexible y escalable.
Cuando alojamos una aplicación en un hosting en la nube, su infraestructura está compuesta por varios servidores físicos interconectados que trabajan en conjunto para proporcionar los recursos necesarios. Esta arquitectura distribuida permite una mayor flexibilidad y escalabilidad, ya que los recursos se asignan dinámicamente según las necesidades actuales de cada aplicación.
Proveedores de la nube pública como AWS, Azure o Google Cloud ofrecen servicios de cloud hosting que permiten a las empresas aprovechar estas ventajas sin tener que invertir en infraestructura propia. Estos proveedores garantizan alta disponibilidad, seguridad y rendimiento, además de ofrecer herramientas avanzadas para la gestión y monitorización de los recursos y costes.
También se puede optar por hosting cloud privados, que a pesar de requerir una inversión mayor, ofrecen características más exclusivas, sobre todo en cuestiones de seguridad y privacidad.
¿Cuál es la diferencia entre hosting web y cloud hosting?
La principal diferencia entre un hosting web y un cloud hosting es la forma en que se distribuyen y gestionan los recursos del servidor. En el hosting web tradicional, las aplicaciones o web se alojan en un único servidor físico con recursos limitados, los cuales solo se pueden ampliar aumentando o actualizando sus componentes.
Por otro lado, el cloud hosting utiliza una red de servidores interconectados, donde los recursos son prácticamente ilimitados, ya que se pueden asignar dinámicamente según las necesidades de cada aplicación. Esto significa que las aplicaciones pueden acceder a más recursos cuando lo necesitan, sin estar limitadas por las especificaciones de un único servidor físico.
También tienen una gran diferencia en el modelo de facturación. En general, los hostings web tradicionales suelen tener planes de precios fijos basados en características predefinidas, mientras que el cloud hosting sigue un modelo de pago por uso.
En caso de querer mejorar las características de alojamiento, el cloud hosting permite escalar los recursos de forma instantánea y pagar solo por lo que se utiliza, mientras que en el hosting web tradicional, generalmente se requiere cambiar de plan o contratar servicios adicionales.
Por otro lado, el hosting web tradicional suele ofrecer una configuración más simple y directa, lo que puede ser beneficioso para proyectos pequeños o usuarios con menos experiencia técnica. Por su lado, el hosting cloud ofrece muchas más opciones, lo que conlleva en genera una configuración más compleja.
Ventajas del cloud hosting
- Escalabilidad: una de las principales ventajas del cloud hosting es su capacidad de escalar recursos según las necesidades. Esto permite a las empresas ajustar rápidamente la capacidad de sus servidores en respuesta a picos de tráfico o crecimiento del negocio. Además, esta flexibilidad se traduce en un mejor rendimiento y una experiencia de usuario más fluida.
- Alta disponibilidad: la arquitectura distribuida del cloud hosting garantiza una alta disponibilidad. Al utilizar múltiples servidores, se reduce significativamente el riesgo de tiempo de inactividad debido a fallos de hardware o mantenimiento. Esta redundancia asegura que las aplicaciones y sitios web alojados en la nube estén accesibles prácticamente en todo momento.
- Coste: el modelo de pago por uso del cloud hosting permite a las empresas optimizar sus costes de infraestructura. Al pagar solo por los recursos que realmente utilizan, las organizaciones pueden evitar gastos innecesarios en capacidad no utilizada. Esta flexibilidad financiera es especialmente beneficiosa para startups y empresas en crecimiento.
- Rendimiento: ofrece un rendimiento superior gracias a su capacidad para distribuir la carga de trabajo entre múltiples servidores. Esta arquitectura permite una respuesta más rápida a las solicitudes de los usuarios, reduciendo los tiempos de carga y mejorando la experiencia general. Además, la posibilidad de asignar recursos adicionales en tiempo real garantiza un rendimiento óptimo incluso durante períodos de alto tráfico.
- Seguridad: el cloud hosting ofrece robustas medidas de seguridad, incluyendo cifrado de datos, firewalls avanzados y copias de seguridad automáticas. Los proveedores de servicios en la nube invierten constantemente en tecnologías de seguridad de última generación, así como distintas medidas que evitan catástrofes de seguridad virtual y física (incendios, inundaciones, etc.).
- Flexibilidad geográfica: el cloud hosting permite a las empresas distribuir sus aplicaciones y datos en múltiples ubicaciones geográficas. Esto no solo mejora la velocidad de acceso para usuarios en diferentes regiones, sino que también proporciona una capa adicional de redundancia y recuperación ante desastres.
¿Qué tipos de aplicaciones o webs pueden aprovechar mejor las características de cloud hosting?
Cualquier tipo de aplicación o web puede alojarse en un host en la nube. Desde un sitio web corporativo o una web app hasta una tienda online o un SaaS. Sin embargo, hay ciertos tipos de proyectos que pueden beneficiarse especialmente de las características únicas del cloud hosting.
- Tráfico alto: las aplicaciones o webs de alto tráfico, como por ejemplo una plataforma de streaming o un ecommerce, suelen alojarse en la nube. La razón es que es más sencillo que ofrezcan un rendimiento mayor debido a una mayor potencia de procesamiento, ancho de banda, memoria, etc. Los hostings tradicionales tienen recursos más limitados.
- Tráfico variante: las aplicaciones o sitios web con tráfico fluctuante también se benefician enormemente del cloud hosting. Por ejemplo, un sitio de noticias que experimenta picos de tráfico durante eventos importantes o una plataforma de e-learning que tiene mayor demanda durante ciertos períodos del año. La capacidad de escalar recursos automáticamente permite manejar estos picos sin comprometer el rendimiento.
- Aplicaciones críticas: en el sector médico o financiero, donde la disponibilidad y la integridad de los datos es muy importante, se benefician enormemente del cloud hosting. La alta disponibilidad y las medidas de seguridad avanzadas que ofrece la nube son ideales para garantizar que estas aplicaciones funcionen ininterrumpidamente.
- Aplicaciones en desarrollo: las startups y empresas en crecimiento también pueden beneficiarse enormemente del cloud hosting. La flexibilidad y escalabilidad que ofrece la nube permiten a estas empresas adaptarse rápidamente a las cambiantes necesidades de sus usuarios y del mercado. Además, el modelo de pago por uso puede resultar más económico para empresas que están en sus primeras etapas y necesitan controlar sus gastos.
- Aplicaciones con requisitos de cumplimiento: muchas industrias, como la sanitaria o la financiera, están sujetas a estrictas regulaciones en cuanto al manejo y almacenamiento de datos. El cloud hosting ofrece soluciones que cumplen con estos requisitos normativos, proporcionando características como el cifrado de datos en reposo y en tránsito, controles de acceso granulares y registros de auditoría detallados.
¿Cuándo optar por el hosting cloud?
Las empresas que tienen una web corporativa con poco tráfico, una tienda online pequeña o una aplicación con pocos usuarios permanentes, pueden optar por un hosting web tradicional. No solo les resultará más sencillo gestionarlo, sino que los recursos que ofrece serán más que suficientes y el coste será más asequible.
Sin embargo, cuando hablamos de aplicaciones en crecimiento, con tráfico alto y variable o con necesidades de alta disponibilidad, el cloud hosting se convierte en la opción más adecuada. Hablamos por ejemplo de tiendas online que tienen una facturación diaria media o alto, software cloud un número de usuarios recurrente considerables, webs medianas o grandes donde existen picos de tráfico de manera habitual…
Para que puedas hacerte una idea más clara, podemos ver el ejemplo Freshly Cosmetics, que con la ayuda de Ausum Cloud, decidió migrar su ecommerce a la nube de AWS.
Este caso de éxito demuestra cómo una empresa de comercio electrónico en crecimiento puede beneficiarse significativamente del cloud hosting. Al migrar a la nube, Freshly Cosmetics pudo mejorar su rendimiento, escalabilidad y capacidad para manejar picos de tráfico, especialmente durante períodos de alta demanda como las campañas de marketing, promociones o durante el Black Friday, cuando su tráfico puede multiplicarse hasta por 20.
Esta transición no solo optimizó sus operaciones, sino que también les proporcionó una base tecnológica más robusta para su expansión futura. Ahora tiene la tranquilidad de que su ecommerce estará 100 % disponible, con unos costes sin sobredimensionar y listo para adaptarse a cualquier situación.
Si estás considerando migrar tu aplicación o sitio web al cloud hosting, no dudes en contar con los expertos en la nube de Ausum Cloud. Nuestro equipo te guiará a través del proceso de migración, asegurando una transición suave y sin problemas. Toda nuestra experiencia en la implementación de soluciones cloud para empresas de diversos tamaños y sectores está a tu servicio.