Observability: el siguiente nivel de la monitorización 

Jenkins vs. CircleCI: ¿Cuál es la mejor herramienta CI/CD? Te lo mostramos en Ausum Cloud

Con el paso de los años y la evolución del desarrollo IT hacia el cloud native, ha surgido una nueva forma de monitorizar, proteger y reparar infraestructuras tecnológicas conocido como Observability u Observabilidad. A pesar de que se basa en la monitorización tradicional, la observabilidad va un paso más allá en la comprensión e interpretación de un sistema IT.  

Observability: el siguiente nivel de la monitorización

En un mundo donde los desarrollos son cada vez más dinámicos, los componentes más distribuidos y los elementos individuales más numerosos, la observabilidad ofrece una visión completa, en tiempo real, milimétrica y automatizada. Esto permite a los equipos proporcionar un soporte eficiente y preventivo en lugar de reactivo.  

A continuación te explicamos a qué nos referimos exactamente cuando hablamos de observabilidad, cómo funciona o qué ventajas ofrece respecto a la monitorización tradicional.

¿Qué es la observabilidad? 

La observabilidad es un término relativamente novedoso en el mundo IT, el cual proviene del mundo de la ingeniería y de la teoría de control. Si atendemos a su definición general, la observabilidad podría definirse como el grado de comprensión del estado interno de un sistema basándonos únicamente en el conocimiento que proporciona sus salidas externas.  

Si trasladamos la observabilidad al sector del cloud computing, este hace referencia al conjunto de herramientas y prácticas que permiten comprender el estado interno de los sistemas y aplicaciones a partir de los registros y telemetría que proporciona la monitorización.  

Esta nos permite analizar un flujo constante de datos para medir el rendimiento del hardware, el software y estado de la red, con la finalidad de supervisar, resolver, depurar, reaccionar, prevenir y predecir.  

El objetivo final es conseguir que un sistema sea lo más observable posible para reducir el tiempo que transcurre desde que se detecta un problema hasta que se resuelve. Es decir, se trata de una metodología de monitorización más rápida y precisa y que ofrece un rendimiento óptimo que cumpla con las expectativas de los usuarios.  

¿Qué es la observabilidad?

Los tres pilares de la observabilidad 

Para seguir aprendiendo cómo funciona la observabilidad es necesario hablar de la trazabilidad. Tradicionalmente, los software de monitorización proporcionaban una telemetría precisa y lo suficientemente rápida. Automatizando las alertas e identificando los indicadores claves de un sistema era suficiente a la hora de abordar o impedir problemas.  

Sin embargo, a medida que las empresas han ido trasladando sus operaciones a la nube, este sistema se ha vuelto anticuado e ineficiente. Las infraestructuras informáticas han pasado de ser centralizadas y estáticas a ser distribuidas, variadas y dinámicas. Por este motivo es necesario un sistema de monitorización más preciso y rápido.  

La nube proporciona infraestructuras más ágiles perfectas para las metodologías modernas de desarrollo, la entrega continua, microservicios y tecnologías native cloud. Ante esto, es necesario un sistema de telemetría de mayor calidad, que mida más rápidamente, que cree registros fiables y capaz de englobar toda la información en un mismo lugar. Para conseguirlo, la observabilidad se basa en tres pilares de información fundamentales. 

1. Registros

Los registros nos cuentan que sucede en todo momento de forma milimétrica. Son la forma más común de averiguar qué ha ocurrido y por qué, ya que son granulares y con marca de tiempo milisegundo a milisegundo. Son completos e inmutables, por lo que proporcionan una información fiable. La observabilidad los utiliza no solo para reaccionar, si no también para prevenir y predecir futuros sucesos.

2. Métricas

Cuando hablamos de métricas nos referimos a métricas temporales que miden algunos de los indicadores fundamentales de una infraestructura, máquina virtual o contenedores. Podrías ser por ejemplo el porcentaje de uso de la CPU o memoria RAM, el número total de errores devueltos por una API o la capacidad de uso de disco. Se utilizan para medir la salud generaldel sistema y detectar anomalías de una forma sencilla.

3. Trazabilidad

Por otro lado también se debe tener en cuenta lo que se conoce como trazas o trazabilidad. Se tratan de registros de viaje que nos ofrece información sobre la ejecución de una aplicación. Cada solicitud queda registrada paso a paso, registrando la propagación de la información a través de los componentes de un sistema. Esto nos permite identificar exactamente donde, cómo o por qué se produce un cuello de botella o un error.  

Gracias a la trazabilidad, los registros y las métricas, así como de las dependencias de cada sistema, las plataformas observability relacionan toda la información en tiempo real para ofrecer una visión completa y contextual. Además, gracias al uso de herramientas de AIOPS, es posible identificar y resolver problemas de manera automatizada.

Los tres pilares de la observabilidad

Ventajas de la observabilidad frente a la monitorización

A primera vista, la observabilidad puede parecer tan solo un término de moda para referirse a la monitorización, pero la realidad es que se trata de un nivel más avanzado que ofrece infinidad de ventajas. Veamos las principales.  

  • Detectar problemas desconocidos: la monitorización se basa en detectar problemas previamente conocidos. Las plataformas observability y la relación de múltiples fuentes de datos permite detectar problemas desconocidos, proporcionado todo el contexto e identificando la causa raíz para una resolución acelerada.  
  • Comprensión más sencilla: cuando tenemos una visión 360º de un sistema, este es más fácil de comprender, proteger, reparar o actualizar. La observabilidad nos ofrece una visión completa, detallada y precisa que las infraestructuras cloud necesitan.  
  • Fiabilidad: alcanzar un rendimiento óptimo y ofrecer una experiencia de usuario inigualable son los principales objetivos de cualquier infraestructura TI. La observabilidad proporciona una monitorización total y efectiva para alcanzarlos.  
  • Escalabilidad: a medida que las infraestructuras van creciendo, es posible agregar los nuevos elementos incluso de manera automática. Esto permite obtener datos siempre actualizados, incluso de componentes como contenedores que pueden iniciarse o detenerse de forma manual frecuentemente.  
  • Rendimiento: si tenemos en cuenta todo lo anterior, es fácil deducir que un sistema más observable asegura también un mayor rendimiento. Esto también se puede aplicar a los costes o a la seguridad. A partir de la información obtenida, es seguir mejorando la infraestructura de manera constante en todas sus áreas.  
  • Automatización: el uso de inteligencia artificial y machine learning permite habilitar la corrección automatizada, corrigiendo los errores más comunes sin intervención humana, de manera instantánea y de forma transparente para los usuarios.  
  • Predicción: de la misma forma, la monitorización constante y la recopilación de información permiten aplicar técnicas de Big Data que habilitan el mantenimiento predictivo. Esto permite identificar patrones de uso, detectar anomalías, optimizar recursos y aplicar medidas preventivas.  

La observabilidad apuesta por un sistema de monitorización detallado capaz de correlacionar toda la información disponible y entregar informes de estado completos y en tiempo real. Esto permite activar el mantenimiento predictivo, adelantarnos a los problemas y mejorar el rendimiento de una infraestructura de manera constante.  

Como expertos en cloud computing, en Ausum Cloud ofrecemos un servicio de monitorización y mantenimiento basado en la observabilidad. Si quieres mejorar el rendimiento de tu infraestructura cloud, ahorrar costes y aumentar la productividad, no dudes en contactar con nosotros. ¡Estamos a tu disposición!